Aunque todavía no hay confirmación oficial, los rumores sobre la aparición de Madonna en el festival de Glastonbury, en julio del año que viene, han ganado fuerza en los últimos días. Fuentes de la organización del evento, que se celebra anualmente en la llamada Worthy Farm, en el condado inglés de Somerset, han revelado ahora que la reina del pop liderará el cartel de artistas de la jornada del domingo, que suele reservarse a las estrellas más veteranas.
Los mismos informantes señalan que el espectáculo del viernes tendrá como gran protagonista a Dua Lipa, quien acaba de anunciar nuevo sencillo y disco para 2024, mientras que el reclamo principal del sábado será Coldplay, la banda liderada por Chris Martin. La formación británica ya atesora una dilatada experiencia en estas lides, ya que fue cabeza de cartel en los años 2002, 2005, 2011 y 2016. “Es un repertorio ideal, una mezcla brillante de música diversa y diferentes ambientes”, ha adelantado un confidente al semanario Mail on Sunday.
La decisión de invertir tiempo y dinero en traer a una figura como Madonna, quien nunca se ha prodigado demasiado en los festivales veraniegos, así como la de otorgar mayor protagonismo a una estrella local como Dua Lipa, también se explica con razones extramusicales. En los últimos años, la organización ha recibido duras críticas por su supuesta predilección por los artistas masculinos. Emily Eavis, máxima responsable del festival tras la jubilación de su padre Michael, fundador del evento, asumió con deportividad esos reproches y prometió mejoras al respecto.
La hipotética actuación de Madonna en la jornada final del domingo, en el escenario principal conocido como ‘Pyramid Stage’, ha pasado de ser una mera conjetura a una posibilidad cada vez más real. La propia Eavis dejó entrever recientemente, en conversación con los locutores musicales Annie Mac y Nick Grimshaw, dos de los rostros más visibles de la BBC, que había recibido una llamada del agente de una “artista estadounidense muy importante”. “Normalmente, en julio ya tenemos casi cerrada la lista, pero este año hemos esperado un poco. Y cuando me dijeron que esa persona estaría libre el año que viene, pensé: ‘Gracias a Dios que lo habíamos dejado abierto'”, admitía.